Un porcentaje importante de las familias que acuden a una empresa como la nuestra especializada en ofrecer los servicios de cuidadoras internas en Chamberi, Madrid, lo hace después de que se haya producido un accidente, de mayor o menor gravedad, que indica que el anciano ya no está en condiciones de valerse por sí mismo. En la mayor parte de los casos estos accidentes ´tienen su origen en el deterioro, tanto físico como psicológico, que produce el paso del tiempo.
Con la edad, el anciano pierde fuerza en sus músculos, pierde parte de sus reflejos y pierde también capacidad visual. Estas tres pérdidas suponen que, no es capaz de ver un obstáculo en su camino y no lo percibe hasta que ha tropezado con él, al fallarle los reflejos y la fuerza, no es capaz de sujetarse y cae al suelo. En este caso, la ayuda nuestras cuidadoras internas en Chamberi, Madrid es una de las fórmulas más eficaces de evitar este tipo de accidentes.
Otra de las consecuencias de la edad es la pérdida de memoria, especialmente de
la memoria a corto plazo. Es posible que hayas escuchado muchas veces que un
anciano recuerda con asombrosa lucidez hechos que ocurrieron hace 50 ó 60 años
pero es incapaz de recordar dónde dejó las gafas de leer. Estos olvidos pueden
tener consecuencias de alto riesgo. Es frecuente que, por atender el teléfono,
olvide que dejó una sartén al fuego y, pasado el rato el aceite comienza a
arder.
Ocurre también que olvida tomar la medicación que tiene prescrita o que, hace
varias tomas el mismo día lo que da lugar a una intoxicación. Evitar que se
produzcan este tipo de accidentes es una de las tareas que tiene encomendadas
el personal de Umaniza. Llámanos si necesitas más información o si requieres de nuestros servicios.